Andrés Bosch
Novela
Ed. Planeta
(Col. Populares), 259 págs.
Andrés Bosch debutó
a los treinta y tres años en el panorama literario español con esta novela, ganadora
del Premio Planeta en 1959. Bosch nació circunstancialmente en Palma de
Mallorca en 1926, pero desde muy pequeño se trasladó a Barcelona, ciudad en la vivió
hasta su muerte en 1984, a excepción de los dos años que pasó en América Latina
(Venezuela, Colombia y Costa Rica) viajando y realizando trabajos esporádicos.
En una entrevista afirmaba que escribió la novela en poco más de un mes: “Diez
días tardé en planear La noche, luego
la escribí en veintitantos.”
La noche es una novela dura. El
protagonista, Luis Canales, tiene 24 años, trabaja en una fábrica textil —donde
se le conoce simplemente como “el-que-lava-las-madejas”— y vive en una casucha
de un barrio periférico junto a una mujer a la que no quiere y dos hijos a los
que casi no conoce. Un día un compañero de trabajo y boxeador, Bernardo Barba,
le invita a ver uno de sus combates. Durante la pelea, Canales quedará fascinado
por el boxeo, un deporte en el que ve una forma de autoconocimiento, la
posibilidad de descubrir quién es en realidad: “Al presenciar el combate de
Bernardo contra Collado, me di cuenta de que en el boxeo uno podía llegar a ser
lo que uno realmente valía. Que allí había una escala de valores, y que se
podía fracasar o triunfar, dependiendo ello de la propia conducta. Y que en
aquel camino yo podía llegar a ser Luis Canales.”
A raíz de esa
atracción, Canales se apunta al gimnasio donde entrena su amigo y pronto
descubre que, sin ser un gran estilista, posee un golpe tremendo, una izquierda
cruzada al hígado capaz de noquear a cualquier rival. Así dará comienzo su
exitosa carrera pugilística, que lo lleva a pelear por el Campeonato de España
del peso gallo y a aspirar al título continental contra el francés Gerard
Grand. Sin embargo, antes deberá superar una durísima eliminatoria contra el
portugués Joao Sousa (combate con el que comienza la novela en un breve e
intenso flashfoward) de la que saldrá
gravemente lesionado, en parte a causa de su manera de boxear, siempre al
ataque, siempre fajándose en la corta distancia y dispuesto encajar cuatro
manos con tal de poder colocar su famosa izquierda. Tras superar a Sousa en
siete agónicos rounds, “Luisito” Canales deberá decidir qué le importa más, la
posibilidad de convertirse en campeón de Europa o su propia salud física. Es en
ese momento cuando el título de la novela cobra un nuevo significado y el
lector descubre su doble sentido.
La trama incluye
todos los ingredientes de una buena novela de boxeo. Además de las acertadas crónicas
de los combates, Bosch también describe el ambiente del gimnasio y de la
competición profesional. Por ella pululan toda una galería de personajes
secundarios: managers con pocos escrúpulos, ávidos promotores, viejos entrenadores
y, principalmente, los compañeros boxeadores del protagonista: Lázaro, Kutz,
Jim Echevarría —contra el que deberá pelear por el título estatal— y, por
supuesto, Bernardo Barba, paradigma de boxeador “sonado” que un día estuvo en
la cima, cuya carrera va en declive paralelamente al ascenso de Canales y que
no deja de pensar en prepararse para disputar de nuevo el campeonato estatal,
combate que ya sólo se librará dentro de su cabeza.
La novela está
escrita con sinceridad y sencillez, el estilo de Andrés Bosch es seco y directo
como un buen jab. En la entrevista que concedió tras ganar el Planeta reconocía
que, al igual que su protagonista, lo suyo no eran los ejercicios de estilo:
“Me siento incapacitado para el estilismo. No es desprecio, creo que me
gustaría; es que no me sale”. Su profundo conocimiento del mundo del boxeo no
es inventado, Bosch fue boxeador aficionado en la categoría de peso ligero
—incluso llegaron a romperle la nariz en un combate amateur—, sin embargo, no se
trata de una novela autobiográfica, sino de una obra de ficción fruto de su
propia experiencia.
Por último, una
única pega: este libro no lo encontrarán en la FNAC ni en su librería habitual.
A pesar de que existen múltiples ediciones, son todas ellas bastante antiguas. Si
ustedes desean leerlo les recomiendo que hagan como yo y visiten la web de
iberlibro, donde
podrán hacerse con un ejemplar de segunda mano que recibirán cómodamente en su
casa por menos de lo que cuestan dos cañas. Ya verán como el gasto vale la
pena.